3 jun 2014

El mejor TRI que me ha tocado ver: 1994



Por: Emiliano La Pointe Pineda
Cuando de representativos aztecas mundialistas se trata no tengo que pensarlo ni un segundo, el combinado que participó en Estados Unidos 94 es lo mejor que me ha tocado ver.
Sin embargo no voy a profundizar en aquella selección, la que avanzó en primer lugar del llamado “grupo de la muerte”, sino de las circunstancias que -creo yo- se mezclaron como pócima de alquimia para literalmente reverdecer al equipo de todos.
Empecemos por Antonio Moreno, un profesional del periodismo deportivo que realizó una investigación con la que se develó el infame “cachirulazo”. Dicho escándalo generó sanciones en Concacaf y después, gracias a la ineptitud de los hombres de pantalón largo, el castigo se amplió desde la FIFA.
Las repercusiones fueron fatales para el balompié nacional pues México perdió toda posibilidad de disputar el mundial de Italia 90.  Este cisma sacudió por completo la estructura administrativa del fútbol mexicano, por lo que los directivos se vieron en la necesidad de replantear las estrategias que ese deporte debía seguir dentro y fuera de la cancha.
Es así como apostaron por traer a César Luis Menotti, quien revolucionó el planteamiento de partido y la mentalidad de los seleccionados. Lamentablemente algunas cuestiones extra cancha derivaron en la renuncia de “el Flaco”. Pero entonces se acudió al que fuera uno de los mejores y más jóvenes estrategas nacionales de esa época, Miguel Mejía Barón.
“El doctor” terminó de consolidar el proyecto iniciado por el sudamericano, y supo aprovechar al máximo a la generación de felinos universitarios, a los que hizo campeones en 1991. Jugadores emblemáticos como Jorge Campos, Luis García, Ramírez Perales, García Aspe y Claudio Suárez fueron la base del conjunto que asistió a Estados unidos 94.
Además, futbolistas entregados como Miguel España, David Patiño, Luis Flores y el propio Hugo Sánchez fueron convocados en algún momento del proceso 91-94 para portar la verde.
En total, si no olvidé ingratamente a alguien, son nueve hombres que en su paso por C.U. convivieron con Ricardo Ferretti, a quien seguramente le aprendieron mucho pues él comandó a los Pumas que vencieron a un América espectacular y coronaron una sensacional temporada en la que además de campeones, los del pedregal fueron líderes generales, el equipo más goleador, la mejor defensa y, por si fuera poco, tenían en sus filas al mejor artillero del país.
Esa gran generación surgida de la cantera universitaria, complementada con elementos como Luis Roberto Alves “Zague”, Benjamín Galindo, Ramón Ramírez y Nacho Ambriz, quienes destacaban por su efectividad, clase, desequilibrio o liderazgo, conformaron en toda la extensión de las palabras una selección y un conjunto nacional.
De esta manera la formulación para obtener una escuadra realmente competitiva y profesional, que rebosaba calidad y carisma, requirió de una prensa zagas y crítica, un toque de estrategia pampera y un ejemplo de carácter amazónico, pero sobre todo del escándalo por no participar en una copa mundial y su consecuente limpia federativa.
Vaya maldito el momento en que el fairplay y la competitividad de los norteamericanos dejaron fuera a Panamá. Ya nunca lo sabremos, pero quien quita y el trauma de no ir a Brasil nos ponía a tono para Rusia 2018.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Y tambien contribuyo en mucho para ese replanteamiento el que se le quito el control de la seleccion a Televisa. Gracias a Maurer e Ibarra, hoy tal cosa luce casi imposible.

Unknown dijo...

Que mal artículo! No dice nada...

Unknown dijo...

Coincido y gracias a Maurer se consiguio la invitacion de Conmebol para las copas Americas, ya que sin esas participaciones el futbol nacional profesional estaria muerto...