28 jul 2009

Hungría, Campeón en 1954.

El siguiente es un extracto de un artículo de la "Revista de Revistas" de Excélsior, en su número de noviembre de 1988 dedicado a las capitales del entonces bloque socialista europeo.


Puskas, campeón del mundo en 1954 y 1958.

El mundo está lleno de monumentos dedicados al futbol. Los hay majestuosos, chicos, anónimos y horrorosos, desperdigados todos ellos entre cementerios, plazas públicas y explanadas de estadios. He visto muchos. En Kiev, por poner sólo un ejemplo, hay dos: el que homenajea a los jugadores del Dínamo que fueron ejecutados por los Nazis en 1942, y el que se erigió en memoria del más grande de todos los arqueros: Lev Yashin. Estar frente a ellos resulta conmovedor. Pero en mi opinión el monumento de futbol más bello es el “Sikra Száll” de Budapest, mismo que celebra el Campeonato obtenido por el equipo húngaro en el Mundial de Suiza en 1954. Si usted nunca lo ha visto ni siquiera en una tarjeta postal, permítame intentar describirle su historia y arquitectura en unas cuantas líneas:

No habían pasado ni tres semanas de que la selección comandada por Puskas volvió de Suiza cuando el Secretario General del Partido Comunista de Hungría, Matías Rakósy, organizó un concurso entre los arquitectos más prestigiados del país para diseñar un monumento que celebrara lo que él calificó como “una victoria histórica del pueblo húngaro y toda la clase obrera mundial”. El jurado, compuesto por académicos de todo el bloque socialista, vio desfilar más de 50 proyectos sin que ninguno lograra llenarle el ojo hasta que después de 5 meses tocó el turno al joven arquitecto Alfréd Hajós. Su propuesta cautivó hasta al juez más exigente y ganó el concurso por unanimidad.

Una vez aprobado el proyecto se conformó una asamblea ciudadana encargada de escoger el mejor sitio para erigirlo. Encabezados por Lázló Somogy, el gran director de la Filarmónica Nacional, la asamblea eligió el margen occidental del Danubio, sobre la avenida Bem Rakpart, cerca del Puente de Cadena y casi frente al exquisito edificio del Parlamento. El Partido Comunista estuvo de acuerdo.

Pero por ningún motivo piense usted que el monumento tiene algo que ver con esos adefesios cuadrados y grises producto del orden socialista. Se trata de algo más simple pero no por ello menos poderoso. Si usted lo visita pensará que se encuentra en una plaza cuya superficie, no mayor a unos 70 metros cuadrados, está cubierta con pasto. Y no es cualquier pasto, qué va, pues proviene de la cancha del Estadio Wankdorf, misma donde se jugó la final de 1954. En el extremo norte y sur hay un par de porterías de madera, ambas traídas desde el campo de entrenamiento donde la selección húngara se preparó de cara a dicho Mundial. En el centro del césped se abre un hueco de dos metros cuadrados y uno de profundidad cubierto por una plancha de vidrio contra balas. Y es ahí, precisamente, donde se encuentra el corazón del monumento.

¿Qué hay ahí? Se preguntará usted. ¿Acaso los restos del entrenador de la “selección dorada” Gusztáv Sebes? ¿o las cenizas de algunos de sus jugadores como Lajos Tichy, Ferenc Bene, Flórián Albert? No. Lo que hay ahí, querido lector, es una caja llena de zapatos de futbol de fabricación alemana. Hoy en día, cuando estamos a un par de años de entrar a la década de los 90, unos zapatos como esos no sorprenden a nadie. Pero hace 34 años cuando los jugadores usaban zapatos con suelas sin “tachones”, eran una innovación que representaba una ventaja para cualquier equipo que los usara. Eso lo sabía muy bien su creador, Adi Dassler, y también la policía secreta de Hungría, la AHV. Así fue como dos agentes, haciéndose pasar por empleados del servicio postal alemán, lograron interceptar la caja que de otra forma habría llegado a Berna un día antes de la final.

El resto de la historia usted ya lo sabe. Hungría derrotó a Alemania 5-0 bajo una lluvia torrencial consiguiendo el primero de sus 3 campeonatos mundiales (los otros dos, por si lo ha olvidado, fueron en 1958 y 1966).

Gabriel Liceaga
Enviado especial


Vista panorámica del Sikra Száll.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

que gran imprecision, si alemania fue campeon en el 54 xDDDDDDDDDDDD

han de star drogados o en una realidad alterna, que se yo :P

Francisco dijo...

Ese monumento es para amateurs. Les recomiendo que le echen un ojo al Parque al Árbitro de Tumbes, Perú, en http://www.caretas.com.pe/2004/1824/web/cartas/6-1.jpg

Marco Dávila dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Guillermo Rojas dijo...

Brillante. Muchas felicidades por este ejercicio que nos demuestra que el futbol da para escribir cosas de gran calidad.

Anónimo dijo...

Excelente idea esta de escribir sobre historia ficticia acerca de futbol. Una idea: qué hubiera pasado si al Abuelo Cruz no le anulan el gol contra Alemania en el 86. Mi pronóstico es que hubiésemos llegado a la final. Ya ahí quién sabe qué pasa.

El George dijo...

No se vale ...Porqué juegan con mi mente y con mis recuerdos ??? .. jejejejejejejejejejeje !!!

Anónimo dijo...

Si será pendejo el que puso el primer comentario... ¿Te dice algo el que en esta página exista una sección llamada "rincón del hubiera"?

Anónimo dijo...

al pendejo de arriba (si asi nos vamos a referir)

no, no lo vi, eso cambia las cosas...

Juan Camaney dijo...

Creí que sabían de futbol, pero como dice Anónimo este Mundial no lo ganó Hungría, si no me creen ahí está Wikipedia. Al final la explicación de los zapatos no se entiende, la historia está interesante y llevaba buen hilo pero al final la tiraron.

Editor dijo...

Mi querido Juan Camaney. Si tienes un poco de cultura futbolística no hace falta recurrir a Wikipedia para saber que Hungría NO ganó el Mundial, o que los zapatos Adidas fueron clave para que los alemanes derrotaran a loa magyares en lo que se conoce como "el milagro de Berna". Todo lo que leíste es un ejercicio de historia contrafactual. De ahí que el nombre de la sección sea "Qué hubiera pasado sí". De cualquier forma gracias por tu comentario.

Carlos Sarti dijo...

Creo que todos están equivocados...el mundial de 54 lo ganó Uruguay. Semifinales 5-4 a Hungría, y 1-0 cero a Alemania en la Final,javascript:void(0) de penal.

Saludos!