Desde la lejana época en que Ignacio Trelles
dirigió su primer partido con el Tri, hasta la actual donde el “Turco” Mohammed
ocupa el banquillo de Xolos, muchos entrenadores han
llegado a declarar que su labor al frente de un equipo no influye demasiado en los
resultados.
¿Qué tanto, o más bien qué tan poco?
Según César Luis Menotti un 10 ó 15%, mientras que para Pep Guardiola los triunfos son propiedad exclusiva de los jugadores.
Si hacemos caso a estos dos sabios del
futbol y dejamos de lado la opinión de egocentristas como Hugo Sánchez o
Mourinho, para quienes el DT es el principal responsable- acaso el único,
detrás de cada triunfo, caemos en cuenta que el éxito de un entrenador depende muy
poco de sus conocimientos futbolísticos y mucho, demasiado, de situaciones
sobre las cuales no tiene control.
Ningún planteamiento táctico puede evitar
que el portero más confiable deje escapar un balón entre las manos o el delantero
más letal falle un gol a bocajarro. Tampoco puede superar los errores
arbitrales ni el cáncer más grave que aqueja al futbol actual: los
sobornos.
Lo único que puede llegar a contrarrestarlos es la suerte,
razón por la cual muchos entrenadores de futbol terminan por convertirse en
personas harto supersticiosas. Ahí tenemos a la Tota Carbajal, el “Cinco Copas”, quien
en su época como DT del extinto Atlético Morelia le daba la espalda a su equipo
cuando le marcaban un penal a favor o en contra. Por su parte el argentino Alfio Basile
es conocido por no permitir que sus jugadores utilicen
los números 17 y 13.
Que le digan eso a Mario “Lobo” Zagallo,
quien está tan convencido de la buena suerte que le trae el número 13 que según
el sitio web de FIFA “vive en un piso 13,
se casó un 13 de enero y usó la camiseta número 13 en todos los equipos donde jugó.
Zagallo, que ganó 13 partidos como entrenador en Copas del Mundo auguraba la
victoria de Brasil en Alemania 2006 porque la verdeamarelha debutó el 13 de
junio. Pero el
número 12 se cruzó en su camino… a los 12 minutos del segundo tiempo del
partido de cuartos de final, el 12 de Francia, Thierry Henry (12 letras), anotó
el gol de la eliminación de Brasil. Y ¡qué contrariedad!, fue su marcador
Roberto Carlos (13 letras) quien falló en la cobertura." *
Ni cómo olvidar a Raymond Domenech, el
elegante DT francés que en pleno Mundial 2006 sufrió un amotinamiento
de les bleus por decidir las alineaciones en base a cartas astrales, o a Pancho
Maturana quien supuestamente contrató un brujo gracias al cual Colombia logró
el mítico 5-0 sobre Argentina en Buenos Aires.
Así pues no deben sorprendernos las
revelaciones del “Cabrito” Arellano sobre las cábalas y supercherías de Lavolpe
en su etapa como seleccionador nacional, algunas de las cuales por cierto ya
conocíamos, como aquella espantosa corbata con dragones que utilizó en al
menos la mitad de los partidos en que dirigió al Tri, así como la constante
presencia de una especie de bruja o vidente new age en las concentraciones de
la selección.
Otras, como la visita a la cima de la
pirámide del Sol en Teotihuacán donde los jugadores tuvieron que soplar en
dirección norte y sur para desechar malas vibras, o aquella en que se les pidió escribieran sus miedos en una hoja de papel para luego guardarlos dentro de
un ataúd (miniatura supongo) que fue enterrado en algún lugar de
las instalaciones del Centro de Alto Rendimiento, son tan obvias que
carecen de cualquier novedad.
Lo que debería resultarnos escandaloso, en todo caso, es la poca efectividad de los artilugios antes mencionados. Y es que con ellos no se
logró nada de lo que Lavolpe había vaticinado: ni jugar las finales de la Copa
América de Perú y Confederaciones 2005, ni alcanzar los cuartos
de final en el Mundial de Alemania 2006.
Lo que sí cumplió cabalmente fue su promesa de
ganar las eliminatorias de Concacaf “caminando”. Para lo cual, claro está, no
hacen falta hechizos ni brujos de Catemaco; solamente asegurarse desde ese 10% que representa estar en la banca que los jugadores sobre la cancha hagan bien el 90% que
les toca.
* Extraído de la página oficial de FIFA
2 comentarios:
¿Qué no la bruja era del Cape Carrillo?
Hasta los narcos usan esos artilugios, y comprobado está que no sirven nada, pregúntenle al Lazca, sino! buena entrada, saludos al editor, sigo esperando que me invites a cenar !
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