Es una lástima que esta selección no sea la misma que representará a México en la Copa América. Sólo así sabríamos de qué calibre es este equipo que en tres partidos lleva catorce goles a favor y solamente uno en contra. Porque dicho con todo respeto, ninguna de las selecciones de la Concacaf se puede comparar con Brasil, Uruguay, Argentina, Chile, Paraguay o Colombia.
Por lo pronto los equipos que se supone son los rivales a vencer del área- Estados Unidos, Honduras y Costa Rica, han dejado mucho que desear. Los gringos perdieron contra el equipo que ocupa el lugar 67 en el ranking de FIFA (Panamá); por su parte catrachos y ticos han mostrado un nivel tan bajo que uno podría pensar que después de la verde amarelha México es el único país con boleto asegurado al Mundial de 2014, lo cual de ninguna manera tendría por qué qué avergonzar al futbol mexicano.
Vergüenza no marcar una diferencia abismal entre el futbol de nuestro país y el del resto de la Concacaf, como ha venido sucediendo en los últimos 15 años. De repente se volvió normal sentir temor por gringos, catrachos y ticos como si se tratara de alemanes, rusos u holandeses. Y vaya que no lo son.
Tampoco nosotros, queda claro. Vamos, la selección todavía está lejos del nivel que le permita ya no digamos quedar entre los primeros cuatro equipos en una Copa Mundial sino alcanzar el desdichado quinto partido. Pero con excepción de los gringos sigue habiendo una distancia sustancial entre el futbol mexicano y cualquiera de la región (y eso que en Centroamérica y el Caribe no sufren pausas de rehidratación, sistema de descenso porcentual, designación de árbitros mediante ordenador, duopolios televisivos, draft…), casi tan grande como la que existe entre el futbol de México y el de España, el de Inglaterra o el de Alemania.
Sobra decir que a los países miembros de la UEFA los tiene sin cuidado el lugar que ocupan respecto a sus contrapartes de la Concacaf. ¿Para ellos qué diferencia tiene enfrentar a México, Costa Rica o Trinidad en un Mundial? Si acaso el idioma. Porque México no es Brasil, los catracos no son Chile, y la Copa de Oro que se juega ad perpetuam en los Estados Unidos no es la Copa América que se jugará en Argentina. Misma donde estará una sub 22 de la que si acaso conocemos cinco o seis nombres.
Esperemos que los sudamericanos no se ensañen con ellos como el Tri mayor lo hizo con Costa Rica.
4 comentarios:
El potencial de la Selección sólo se ve cuando juega Copa América y Copa del Mundo. Desgraciadamente, tendremos que esperar hasta el 2014 (o en su defecto hasta el 2013, si México pasa a la Confederaciones) para ver si esta selección dirigida por De la Torre, tiene buen potencial.
Justo cuando tenemos un "buen" cuadro, y cuando se ve potencial y buen juego, no tenemos la única prueba seria para ver de qué estamos hechos, como lo es la Copa América.
De la sub 22, me conformaría con no ser goleados.
SALUDOS
Lástima que no tendremos la representación de esta selección en la Copa América, dónde seguro no haremos el mejor papel del continente, por lo que sé la Sub 22 no está jugando muy bien.
Saludos editor!!!
ESOS POBRES MUCHACHOS DE LA SUB 22 PINTAN PARA SER CARNE DE CAÑÓN EN COPA AMÉRICA. ADEMÁS DE HABER DEBUTADO YA GRANDECITOS LA MAYORÍA, NO TRAEN ROCE INTERNACIONAL. LOS DEMÁS VAN A JUGAR CON LO MEJOR QUE TIENEN, A VER SI NO VAN Y HACEN UN RIDÍCULO ESPANTOSO COMO SUCEDIÓ EN EL MUNDIAL '78. PINCHES DIRECTIVOS, NO ENTIENDEN LO QUE SIGNIFICA LA PALABRA "PRESTIGIO", QUE ES LO QUE ESTARÁ EN JUEGO. AUNQUE SEA POCO, HAY QUE CUIDARLO
A ver ¿que tal le va, a la mayor?
El único rival a vencer siguen siendo los gabachos y hasta ellos andan chaquetos.
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