Por: Juan Carlos Bracho
Son varias las opiniones que ha desatado la entrevista de Lance Amstrong con la conductora Oprah, pero todas conducen a lo mismo: decepción.
Son varias las opiniones que ha desatado la entrevista de Lance Amstrong con la conductora Oprah, pero todas conducen a lo mismo: decepción.
Con el
impulso de dicho sentimiento, algunos han catalogado el dopaje de Armstrong como la peor “conmoción que el deporte profesional haya sufrido”. Sin embargo para
mí no es otra cosa que una raya más en el gigantesco tigre del deporte
estadounidense.
Siendo sportsbiz uno de los principales negocios de los gringos, dicha criatura es cuidadosamente enmascarada y fabulosamente embellecida; no obstante, el pasado domingo en el juego de campeonato de la AFC de la NFL ese tigre dejo entrever su verdadera naturaleza.
El segundo cuarto
del juego se consumía y los “Pats” se encontraban en zona roja, un habitat
familiar para el que sin duda alguna será el mejor QB en la historia del juego.
Al momento de hacer
el down Brady levantó la mirada en busca de una oportunidad para conseguir las
yardas necesarias. Como un preámbulo de lo que le vendría, éstas se le agotaron
dejándolo con la única opción que a lo largo de su carrera Tom ha visto con
malos ojos: correr… Y es que si se lo piensa un poco la razón resulta obvia;
correr implica salir de esa burbuja de seguridad que es para los QB de la NFL
la bolsa de protección (especialmente para Brady), poniéndolo a merced de “colegas”
hambrientos no sólo de sangre y dolor sino de su sangre y su
dolor. Al ser su única opción y tratando
de conseguir las yardas que necesitaba, Brady se decidió a correr y lo previsto
sucedió.
El profundo Ed Reed
se avalanzó con toda la potencia de su velocidad para, en efecto, “castigar” a
Tom, quien temeroso del impacto calculó su llegada para tratar de incrustar su
pierna derecha justo en la rodilla del profundo al deslizarse. Ed Reed esquivó el ataque y la jugada termino
dejando a los “Pats” en 4to down.
En la narración del
encuentro el ex mariscal de los gigantes Phil Simms emitió un argumento que se
antoja a sentencia: “He puts that leg up to protect himself”. Suponiendo que el
juicio de Simms fuera cierto, la pregunta que salta (misma que gran parte de la
prensa especializada ha ignorado) es:
¿Resulta aceptable
proteger tu integridad exponiendo la de otra persona?
Es claro que para
Brady sí.
Al igual que su
compatriota Lans Amstrong, Brady no vio más allá de su objetivo y eso es lo que
verdaderamente caracteriza a los deportistas norteamericanos (pregúntenle a la
MLB, o a Sean Payton).
Los gringos son
maestros para establecer narrativas acerca de sus semidioses escalando el
Olimpo, pero esos semidioses en realidad son poco menos que caballos desbocados
cuyas capacidades físicas ( falsas o no) eventualmente se ven eclipsadas por su
paupérrima facultad de visión.
4 comentarios:
asi es.. no hay nada q excuse las actitudes de los semidioses americanos.. que valga el comentario.. viven de los que les venden por tv..ojo que aqui hay ciertos grupos que padecen de lo mismo.
Y ahi se les cuestiona por que no dicen, ya no que analicen, los comentaristas, esas actitudes poco leales de sus "grandes" estrellas.
TOM BRADY THE BEST!!!!!!
este blog es de futbol mano, sácate a escribir tus pinches gringadas a otro lado, orele
De los peorcitos posts en la historia de Queridos. ¿Alguien sabe algo del NEB, por cierto?
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