28 ago 2011

MÉXICO EN LLAMAS (Y NOSOTROS VIENDO FUTBOL)


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Por: Marco Dávila / Editor

Menos de 30 horas después de que la ciudad de Monterrey sufriera el atentado terrorista más sanguinario en la historia reciente del país, la jornada del futbol mexicano arrancó como si nada hubiera pasado. Jaguares y Toluca salieron a la cancha del Víctor Manuel Reyna con una manta de apoyo a la sociedad regia, se llevó a cabo un minuto de silencio, y hasta ahí. Tan pronto se escuchó el silbatazo inicial la cerveza comenzó a correr en las tribunas del estadio de Tuxtla y los comentaristas de TV Azteca no tardaron en soltar algún chascarrillo de esos que desafortunadamente mucha gente les celebra. Un día después, a tan solo 50 horas de que el fuego ardiera en el Casino Royale, Santos y Rayados se enfrentaron en el Estadio Tecnológico de Monterrey.

Me van a decir que después de un evento trágico donde murieron 54 madres, hijas, esposas, padres y hermanas, la vida debe continuar. Que la mejor forma de manifestarnos contra los asesinos que han hecho de nuestro país algo similar a lo que fue Colombia a mediados de los 80 es seguir con la rutina de todos los días. Dirán incluso que la distracción que representa el futbol es el mejor bálsamo para una tragedia de tal magnitud. Pero no estoy de acuerdo. Hay cosas mucho más importantes que el futbol. Infinitamente más importantes.

Hacer un alto total y preguntarnos qué podemos hacer, qué nos toca hacer a cada uno de nosotros para salir del atolladero en el que estamos, era una de ellas. Pero entre que las televisoras ya tenían vendidos sus espacios comerciales, que los anunciantes no están dispuestos a dejar de vender una lata de cerveza menos a la semana, y que la gran mayoría de mexicanos hemos tomado la conveniente pero cobarde decisión de acostumbrarnos a los secuestros y decapitados y ejecuciones multitudinarias y Barbies y Chapos y jueces corruptos y políticos ineptos, y ahora actos terroristas, la jornada 7 se llevó a cabo como en cualquier otro fin de semana.

Qué lástima. Se perdió una oportunidad de oro para que esa indignación que nos encanta mostrar en la sobremesa y la plática de café se transformara en hechos. Suspender la jornada no habría significado ningún mensaje para la clase política o el crimen organizado, está claro; pero habría sido una forma de demostrarnos como sociedad que no estamos dispuestos a acostumbrarnos a los actos de sangre.

El Viernes por la noche 500 personas acudieron al Ángel de la Independencia con un discurso más o menos similar. Este es un número 20, 30 ó 100 veces menor al que se da cita en la columna para festejar los triunfos mundialistas de la Selección Mexicana o el campeonato obtenido por algún equipo de la ciudad.

El día que esa misma cantidad de gente se de cita para protestar por un decapitado como el que el Viernes por la mañana apareció en Santa Fe; por un secuestrado sin apellido famoso, un ejecutado al que nadie conoce y ya no digamos un acto infame como el de Monterrey, ese día México comenzará a ser un país mejor.

5 comentarios:

Ex fan dijo...

Como siempre que gusto leer este blog. Cuanta razón tienes, nos quejamos y no hacemos nada!! Lo platicamos unas horas con nuestros amigos y familiares pero simplemente nos da flojera salir de nuestra burbuja. Así seguiremos dejando a los criminales hacer lo que se les da la gana. Es tiempo que empezemos a actuar, que salgamos de nuestra zona de confort! Esto es lo que necesita el pais!

freivaj dijo...

Muy bien escrito.
Hoy en día estamos más preocupados, indignados y enojados. Ya no basta con vivir en cierta zona del país para recibir una bala perdida, esto ya está en todos lados.

El Futbol ha perdido el efecto paliativo que poseía hace 30 años, ya ni siquiera saben: que decirnos.

Lo que me extraña, es que todavia no ha estallado la burbuja.

¿Que estamos esperando?

Anónimo dijo...

Pepe Corvina: Claro, y ese día comenzaré a creer nuevamente en México. Muchos le perdimos la fe hace tiempo, por culpa de la conducta indolente mostrada por millones de compatriotas. Es difícil explicar por qué tendremos un nivel de conciencia tan bajo, pero ahi les va otro indicador: tuvo más rating la noticia de las ladies de Polanco que el incendio del casino en Monterrey y todo su seguimiento. ¿Por qué a tantos mexicanos les gusta la anestesia? Claro que no es agradable enterarse de noticias que hablen de hechos violentos, sangrientos y deshumanizados, pero más nos deshumanizamos si nos acostumbramos a todo este fenómeno, porque nos estaremos resignando a vivir enmedio de toda esta podredumbre asquerosa y entonces si, en tal caso habremos valido madres. Nos acostumbramos a ser una sociedad corrupta, a tolerar e incluso celebrar la corrupción, a admirarla e imitarla, y ya vimos las consecuencias. Por cierto, creo que el día que se eleve un piquito el nivel general de conciencia en el país, también tal vez tengamos un torneo de futbol decente donde no se fomente la mediocridad ni se permita la corrupción. Es la sociedad la que cambia al futbol, porque el futbol es un reflejo de ella.

Raúl Veladíz dijo...

Bien dicho.

Anónimo dijo...

MÉXICO EN UNA LAGUNA... Y MI CORAZON ECHANDOSE CLAVADOS