A nombre de todos los aficionados mayores de 30 años, a quienes nos tocó sufrir las tandas de penales contra Alemania y Bulgaria, el escándalo de los “cachirules”, el surgimiento de Estados Unidos como el rival más temido del área y un rosario de fracasos y hubieras que nos convirtieron en el eterno “Ya merito” del futbol mundial...
Muchas gracias jovenazos.
Porque en una sola tarde nos hicieron olvidar que somos los padres del grito más sumiso que cualquier grada haya inventado: el infame “Sí se puede”; hijos también de una época en que la selección nacional reafirmaba los prejuicios más bajos del carácter mexicano: Perdemos, decíamos, porque somos huevones, porque no sabemos trabajar en equipo, porque le tenemos miedo al éxito.
Nos hicieron olvidar todos aquellos partidos que tantas y tantas selecciones mexicanas de todas las categorías existentes pudieron ganar, que debieron ganar, y que por falta de huevos terminaron perdiendo. De hecho gracias a su papelón podemos ir enterrando de una vez por todas el humillante mote de “Ratoncitos Verdes” (usted perdonará desde arriba, don Manuel Seyde).
Pero lo mejor es que nos hicieron sentir orgullosos de vivir aquí, ahora, en este país en que los triunfos nunca han sido abundantes y donde últimamente hay muy pocas noticias por las cuales festejar.
Que México no es mejor ni peor que lo que era un día antes de la final contra Uruguay, está fuera de toda duda (a pesar de lo que haya dicho el ventajoso de Calderón mientras se tomaba la foto oficial con los laureados en Los Pinos). Lo que es un hecho es que gracias a ustedes, escuincles sub 17, ya sabemos lo que se siente gritar campeón en tu propio suelo. Y eso, para muchos treintones que hemos sufrido tanto con nuestra selección mayor, es razón suficiente para estar contento.
6 comentarios:
cada vez disfruto más leer de futbol, será porque sólo leo aquí. grandísimo post dávila.
Gracias escuincles, porque será de las pocas cosas, por las cuales este año los mexicanos nos sintamos orgullosos y sobre todo felices!! Estos niños merecen tener toda la atención y ayuda para continuar con su nivel de juego y que no cuando lleguen a los 22 no puedan ofrecer nada al futbol.
Gran post, como siempre
muy buen post.... últimamente acostumbrados a tanta desgracia, este triunfo provoca un aliciente. Saludos.
Pepe Corvina dijo: coincido con los compañeros, gran post. Y me alegro mucho porque haya un motivo para festejar, lo que hicieron estos chicos es de un grandísimo mérito. Son limpios y nobles, porque aún no se contagian de toda la inmundicia que ensucia al futbol, especialmente al nuestro. Ellos son la muestra de que el mexicano no nace mediocre, huevón, conformista, agachado, sumiso, corrupto y todos esos adjetivos que nos pretenden endilgar como rasgos distintivos, sino que se vuelve así. Una buena parte de la sociedad que piensa y se comporta apoyándose en esos antivalores parece ser la que termina devorando a sus miembros, enredándolos en una maraña perversa, atenuando los valores verdaderos en favor de aquellos otros. Sentí pena al ver lo que decía la gente entrevistada que celebraba en Reforma: "pues si, yo ahorita debería estar trabajando, pero hoy el trabajo no importa, lo más importante ahora es celebrar esto que LOGRAMOS"... Se ve que mientras sigamos pensando así, el país no cambiará, por muchos logros deportivos que "alcancemos" (o que alcancen deportistas que sean nuestros compatriotas)
De acuerdo el SÍ SE PUEDE es INFAME!
Excelente post!. Saludos
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