Si no fuera porque Costa Rica también mandó un equipo remendado, parecería que aquello de que la Concacaf obligó a sus dos asociados a asistir con equipos sub 22 no es más que una excusa de la Femexfut para tapar su falta de previsión. Porque la invitación a la Copa América no les llegó al cuarto para las doce. Desde hace cuatro años se sabía dónde y cuándo iba a empezar el torneo más importante de América. Se sabía también que las selecciones de Conmebol asistirían con todo su arsenal, por lo cual NO era un torneo como para andar preparando a la selección olímpica.
La Femexfut podría haber armado un equipo con los ocho o diez mejores sub 22 complementados por jugadores como Torrado, Palencia, Israel Castro, Osorio, de Nigris.
En vez de eso mandaron al matadero a un grupo de jóvenes con cierto potencial pero nada de experiencia que fue exhibido y duramente criticado mientras ellos, los directivos de Femexfut, se paseaban de arriba para abajo con los campeones Sub 17 (sobras en las fotos, Decio de María).
En vez de eso mandaron al matadero a un grupo de jóvenes con cierto potencial pero nada de experiencia que fue exhibido y duramente criticado mientras ellos, los directivos de Femexfut, se paseaban de arriba para abajo con los campeones Sub 17 (sobras en las fotos, Decio de María).
Ahora que ultimadamente, y si decimos las cosas como son, México debería asumirse como lo que es: el asociado con más peso en su Confederación, y como tal pudo haber mandado derechito a la chingada a los directivos de la Concacaf que le pidieron mandar una selección que a todas luces sería eliminada.
Momento… ¿cuáles directivos? Hasta donde sabemos Jack Warner ya no está en la Concacaf y quien fuera su brazo derecho, Chuck Blazer, está a nada de seguirle los pasos.
¿Entonces quién obligó a nuestros federativos a sacrificar a la selección de Copa América? ¿Habrá sido el presidente interino, ese cuyo nombre nadie se ha aprendido? ¿Su secretaria tal vez? ¿O qué tal el personal de limpieza? Tratándose de Decio y Justino todo es posible.
¿Entonces quién obligó a nuestros federativos a sacrificar a la selección de Copa América? ¿Habrá sido el presidente interino, ese cuyo nombre nadie se ha aprendido? ¿Su secretaria tal vez? ¿O qué tal el personal de limpieza? Tratándose de Decio y Justino todo es posible.
Hasta la madre más fodonga sabe que si a sus hijos los invitan a la fiesta del vecino riquillo, tiene que limpiarles los mocos y mandarlos con sus mejores garritas.
Ojalá que dentro de cuatro años no vuelvan a hacer la misma pendejada. O mejor aún: ojalá que entonces estén lejos del futbol.
7 comentarios:
APLAUSOOOOOOS!!!! K CHINGON ARTICULO. OJALA QUE LOS PENDEJETES DE DECIO Y JUSTINO LEAN ESTO
Desconozco el nombre, pero seguro el promotor de todos los partidos de la Selección en EEUU puso la condición.
Muy buen post como siempre!!! Postura crítica de excelente nivel! como le hacemos para que esto le llegue a "Necio" y al otro buey?
Saludos
tienen razon y no hay que olvidar que la conmebol,,fue uno de los que presionaron tambien para que no fuera la seleccion de mexico con todas sus estrellas , ojo
La Conmebol lo que quiere es el justo equilibro: que ningún equipo mexicano sea campeón, pero que tampoco hagan el ridículo -no es bueno para el negocio-.
yo no estaba enterada como habian sido las cosas y me preguntaba por que habian mandado a la sub-22 cuando otras selecciones mandaban a sus figuras. Que buen articulo!!!
Pepe Corvina dijo: De acuerdo Lugana, en Conmebol no quieren que un invitado se coma el pastel. Pero en el fondo saben que sería muy difícil que México lograra llevarse esta copa (y si acaso ven que empieza a avanzar, una discreta cuchillada arbitral en semifinales, jugando contra Argentina o Brasil es suficiente para acabar con las aspiraciones nacionales). Más bien parece que la Copa de Oro, así de insignificante como parece, deja más dinero del que quieren reconocer, y la final a toda orquesta siempre será EE.UU. contra México (contando los dos con todas sus figuras). La realidad es esta: México no tiene ni la más remota posibilidad de armar dos selecciones competitivas, ese es el fondo del problema. Apenas tenemos nueve o diez jugadores de talla internacional
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